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Guiño al campo en busca de divisas: Sergio Massa se reunirá con la Mesa de Enlace

Lo había anunciado apenas asumió como ministro de Economía y, finalmente, este viernes se dará el encuentro entre Sergio Massa y los líderes de la Mesa de Enlace. El flamante ministro busca acercar posiciones con los productores agropecuarios y más concretamente afinar el diálogo para incentivar la venta de soja de la campaña 2021/22 que todavía continúa muy demorada. Según los cálculos, una aceleración de la comercialización de la oleaginosa puede convertirse en el espaldarazo fundamental que necesita el Gobierno para hacerse de divisas.



Lo había anunciado apenas asumió como ministro de Economía y, finalmente, este viernes se dará el encuentro entre Sergio Massa y los líderes de la Mesa de Enlace. El flamante ministro busca acercar posiciones con los productores agropecuarios y más concretamente afinar el diálogo para incentivar la venta de soja de la campaña 2021/22 que todavía continúa muy demorada. Según los cálculos, una aceleración de la comercialización de la oleaginosa puede convertirse en el espaldarazo fundamental que necesita el Gobierno para hacerse de divisas.

 

El encuentro se concretará este viernes al mediodía en el partido bonaerense de General Las Heras, pero por el momento no trascendió el lugar exacto de la reunión a la que también asistirá el secretario de Agricultura, Juan José Bahillo. Los líderes agropecuarios buscan que se libere la intervención que hay en algunos mercados exportadores, principalmente el de la carne, pero lo cierto es que todo parece indicar que el equipo de Massa no tiene pensado abrir los envíos de carne vacuna y mucho menos eliminar los volúmenes de equilibrio para las exportaciones de los cereales.

 

La receta sería prácticamente la misma que venía llevando adelante el ahora ex ministro de Agricultura, Julián Domínguez, pero lo que busca Massa es acercar posiciones y conseguir el visto bueno del ruralismo respecto a una posible flexibilización del denominado dólar soja, que hasta el momento no ha sufrido modificaciones pero tampoco un impacto en las operaciones del sector.

 

Incluso durante la semana pasada los productores vendieron apenas 250.000 toneladas de soja, mostrando una caída de más del 40% respecto a la semana previa. La incertidumbre económica y el incremento de la brecha entre el dólar mayorista y los financieros desalentaron durante los últimos meses las ventas de soja. El régimen establecido por el BCRA vino a solucionar parte de ese escenario, pero lo cierto es que los agricultores dicen que el mecanismo resulta poco conveniente porque establece que luego de operar el 30% de la venta al valor del dólar ahorro, no podrán comprar dólar MEP por 90 días de corrido.

 

Según trascendió, esa norma puede ser modificada por el BCRA, pero antes Massa buscará el consenso de la Mesa de Enlace. Otra alternativa que se habría barajado en las últimas semanas es que se pueda convertir el 40% al valor del dólar ahorro y el 60% restante depositarlo en cuenta a la vista ajustada al dólar linked.

 

De cualquier manera, el Gobierno sabe que necesita más dólares de los que están entrando. Hasta mitad de esta semana el sector agroexportador había liquidado alrededor de u$s1.200 millones en el mercado de cambios local, una cifra muy similar a la del mismo periodo del mes anterior, pero inferior a lo que tuvo que desembolsar por importación de energía que ya superó los u$s1.300 millones.

 

Las divisas necesarias vendrían del campo, porque los productores todavía tienen en su poder 21,7 millones de toneladas de soja valuadas en alrededor de u$s14.000 millones, en un contexto además en el que la oleaginosa se mantiene en valores firmes. Este jueves el contrato agosto cerró por arriba de los u$s620 la tonelada en el mercado de Chicago. En tanto, las agroexportadoras, a través de la prefinanciación de exportaciones volcarían unos u$s1.000 millones adicionales en la liquidación de divisas en las próximas semanas, y el sector pesquero otros u$s300. El factor clave, para que agosto cierre con una liquidación por arriba de los u$s4.000 millones, como pretende el Gobierno, es que se destraben las ventas de soja y por eso Massa juega sus cartas para tener de aliados a la Mesa de Enlace.

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