Seis cosas que te están haciendo engordar sin que te des cuenta

Si estás comiendo sano, haciendo ejercicio a diario y, aún así, no notas ninguna mejora en tu peso, es posible que estés haciendo algo mal. Hay ciertos errores y malos hábitos comunes que pueden hacer que una dieta o un plan de vida sana se vayan al traste sin que nos demos cuenta.

1.- No registrar lo que se come. "La mayor parte del tiempo, cuando viene gente a mi oficina diciendo que no están perdiendo peso, el problema es que están comiendo mucho más de lo que piensan", indica la dietista y nutricionista Holly Herrington en declaraciones a Business Insider. "Casi todo el mundo subestina cuánto están comiendo", explica esta especialista, que recuerda que hay comidas saludables que tienen muchas calorías, como los aguacates o los frutos secos. En este sentido, recomienda llevar, al menos durante un par de meses, un registro de lo que comemos, algo que es posible gracias a distintas aplicaciones para smartphone.

2.- No dormir lo suficiente. El descanso también es importante para la salud, y las malas noches pueden llevar a desequilbrios de peso, ya que la falta de sueño incrementa los niveles de grelina, una hormona que incrementa la sesación de hambre. Además, los trastornos del sueño alteran los niveles de azúcar en la sangre e incrementa la resistencia a la insulina.

3.- Comer el mismo número de calorías que el primer día de dieta. Según se pierde peso, las necesidades calóricas cambian, por lo que la dieta debería adaptarse, siempre respetando el número mínimo de calorías que una persona debe ingerir.

4.- El estrés. Los altos niveles de cortisol, la hormona asociada al estrés, pueden incrementar el apetito, especialmente por alimentos con carbohidratos. Estos alimentos pueden causar un aumento rápido en el azúcar en sangre, liberando altos niveles de serotonina que nos reconfortan. El estrés hace entrar en un círculo vicioso en busca de ese confort.

5.- Utilizar edulcorantes artificales. Los edulcorantes artificiales son una forma fácil de reducir las calorías y el azúcar en el corto plazo, pero pueden perjudicar los esfuerzos a largo plazo, ya que el cerebro responde a ellos exigiendo más cantidad de comida o bebida. Es recomendable eliminar todos los edulcorantes artificiales y reemplazarlos por sustancias naturales que además contengan vitaminas y minerales, como la miel.

6.- Problemas médicos. Las condiciones físicas de cada persona también influyen en la dieta. Herrington recomienda visitar a un médico para descartar que las dificultades para perder peso procedan de algun problema de salud, algo que se puede descartar con pruebas muy simples.